SOBRE LA GLOBALIZACIÓN ECONÓMICA Y EL MODELO SOCIALISTA

Esta es la mesa en la que estuve encuadrada para discutir la ponencia marco del Congreso.
Por su interés, pretendo hacer algunas reflexiones sobre ella.
La globalización económica y el rápido y continuo cambio tecnológico caracterizan el nuevo modelo productivo de los países desarrollados. Ambos aspecots están conectados íntimamente: la globalización es la consecuencia de los cambios sin precendentes de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), y ambas, globalización y TIC, aceleran el cambio tecnológico en un proceso imparable que modifica sustancialmente y de manera importante y sin marcha atrás el modelo productivo.
El nuevo modelo productivo exige de las personas más conocimiento y de más calidad, lo que conecta con un nuevo modelo económico donde los servicios tienen cada vez un peso mayor y la sociedad se caracteriza cada vez más por su transformación social y cultural.
Lo peor es que, si no nos ponemos al día, este modelo genera ganadores y perdedores, y la diferencia la marca, entre ambos, el acceso al conocimiento y el nivel de renta (de nuevo en íntima conexión, haciendo cada vez más cierto el viejo aforismo de que cuanto más información, más poder).
El mayor nivel de renta está actualmente relacionado con la mayor cualificación profesional, por lo que a lo largo del debate de la ponencia sobre globalización económica, se plasmó inequívocamente que la PRIORIDAD de los socialistas estriba en la cualificación prrmanente de las personas, es decir, no sólo de los estudiantes sino también de los trabajadores.
Uno de los aspectos que más diferencias va a marcar, y de hecho está marcando, entre las personas y su cualificación y formación está justamente en el acceso a las TIC. La revolución digital puede producir brechas importantes entre personas con distinto origen económico, familiar y/o social. También produce brechas importantes entre personas de distintas generaciones, mayores que las que históricamente han existido y que conviene paliar.
Los socialistas, ante este panorama, hemos acordado la necesidad de realizar inversiones masivas en políticas preventivas, para evitar que estas brechas se produzcan o se agranden.
La prevención tiene que ver con la aplicación del principio de igualdad de oportunidades desde la primera infancia, con y en la familia.
Recordemos nuestra propuesta electoral de hacer del municipio una zona WI-FI, propuesta que tanta burla provocó en CC-AIS. Pues ahora, viendo que es un movimiento y una necesidad imparable, y concretándola para comenzar, hemos llevado a Pleno (confiemos que recuperen la sensatez y voten a favor de las propuestas que son buenas para el pueblo) la propuesta de que todos los edicios municipales sean zona WI-FI. Sobre todo los lugares de reunión y convivencia, en los que en una segunda fase, se deben impartir cursos continuados de acceso a las TIC. Esa es una misión básica en la actualidad que debe defender cualquier persona sensata que vea los cambios vertiginosos que se producen en poco tiempo, para evitar que los que dicen representar se queden (y si se quedan fuera ahora, etarán fuera por mucho tiempo) fuera de los ámbitos que los coloquen en igualdad de condiciones con el resto de mundo desarrollado. Esa misión es muy simple y barata, dada la colaboraciónd el estado en estos ámbitos (subvenciones, formaciónj, apoyos...). La visión va más allá. Es la aspiración a que todos, universitarios y agricultores, jóvenes, niños y mayores, hombres y mujeres, en una palabra, todos y todas, accedamos a las TIC para que ellas no agraven esa valoración que hace continuamente el alcalde de nuestro pueblo de que estamos en un pueblo chico y pobre.
Chico, vale, pero pobre tiene más que ver con esa falta de visión de futuro (más bien de presente) e incluso de incompetencia a la hora de abordar esa misión de cualificación de los ciudadanos y las ciudadanas de San Juan de la Rambla, cuyo valor y capacidad está fuera de toda duda, cualificación que es imprescindible en la actualidad. Hagamos, todos, algo, porque esa pobreza no sea cualitativa, y que nos equiparemos, más pronto que tarde, al movimiento que nos ponga, definitivamente, dentro del progreso.